sábado, 12 de noviembre de 2022

Cartografía de San Antonio de la Marina (IHCM, AIMML n.º 71)

Para aumentar la seguridad de la Marina se realizaría una obra defensiva con función de defender el espigón del puerto. Se denominó cono fuerte de San Antonio empezándose a construir en el año de 1692, con forma triangular, sobre la base del torreón de San Juan, quedando reflejado por primera vez en el plano de 1695[1], mostrando una tronera para artillería señalándose con  la letra: J y el torreón de San Juan con dos cañoneras.

San Antonio de la Marina fue reformando en 1714 por Hugo de Velasco. 

Posteriormente, tras el derrumbe que refleja la cartografía del año 1735[2] de la mitad del muro contiguo al fuerte, situado en el lateral Este entre el torreón de San Juan y el de Florentina, dos años más tarde en 1737 se reedifica San Antonio de la Marina con puente levadizo y una batería con dos troneras para las piezas de la defensa del puerto, contando este con tres piezas de artillería y 30 hombres de guarnición.

Todas estas transformaciones se pueden apreciar en el “Plano y perfil del Fuerte de San Antonio de la Marina” (IHCM, AIMML n.º 71), sin fecha ni autor. El plano en cuestión corresponde a las reformas del antiguo desembarcadero de la Marina y muestra por primera vez en un único documento, la planta, el alzado y la sección del fuerte de San Antonio situado en el frente de Levante de los Primeros Recintos Fortificados de “Melilla la Vieja”.

 Bibliografía:

ARCHIVO INTERMEDIO MILITAR DE MELILLA (AIMML), Exposición en la Biblioteca Militar: “Plano y perfil del Fuerte de San Antonio de la Marina”. En: EL FARO DE MELILLA 2022.10.12; pág. 13.

DÍEZ DE ANES, Alfonso. Plaza de Melilla, remitida en carta del alcalde de esta plaza de 3 de febrero de 1699. AGS. Negociado de Guerra. Leg. 3125: copia en colección Aparici. SHM. nº 282.

MARCOS DE AYALA. Melilla, 14 de febrero de 1692. AGS. MPD.–VIII–253. leg. 2899 G. y Marina.

MICHAUX BELLAIRE, Apuntes para la historia del Rif. Vicente Cerdeira (trad.). Madrid, 1926.

MORALES, Gabriel de (1909). Datos para la historia de Melilla. Melilla: El Telegrama del Rif.

MORÁN BADÓN, P. César (1949). Antiguas poblaciones del Rif”. E en: Archivos del Instituto de Estudios Africanos. Madrid.

SÁEZ CAZORLA, Jesús Miguel (1988). “Atlas arqueológico de Melilla”. TRÁPANA nº 2. Melilla: Asociación de Estudios Melillenses; págs. 20–28. 

SÁEZ CAZORLA, Jesús Miguel y BRAVO NIETO, Antonio (2002). “Melilla la Vieja”. En: Guía de Melilla. León: Everest; págs. 23–33.


[1] Melilla, remitida en carta del alcalde de esta plaza de 8 de marzo de 1696. AGS. Negociado de Guerra. Leg. 3039: copia en colección Aparici. SHM. nº 284.

[2] Descripción ignografica de la plaza de Melilla con sus fortificaciones y fuertes extramuros. Remitido por el gobernador con carta de 8 de septiembre de 1735. AGS. MPD 60 53P.1.

 

jueves, 13 de octubre de 2022

Las Instalaciones Portuarias de Melilla en Época Moderna

 Publicado en Akros: ISSN 1579-0959, Nº. 9, 2010, pags. 43-50

Jesús Miguel Sáez Cazorla

Resumen:

La ciudad de Melilla pasó de la Edad Media a la moderna produciendo en el paisaje de Melilla la desforestación de los montes del Valle del Río de Oro. Una nueva fachada meridional marítima de época moderna guardaba y protegía el embarcadero y condicionará toda una serie de instalaciones.

Summary

The city of Melilla happened of the Average Age to the modern one producing in the landscape of Melilla the deforestation of mounts of the Valley of the Gold River. A new marine meridional facade of modern time kept and protected the wharf and will condition all a series of facilities.

 

(Figura 01) Imagen de ‘Ilustraciones de la casa de Niebla, nos muestra la rada de Melilla en su paso de la Edad Media a la Moderna.

Como decíamos en el artículo de la revista Akros referente a la Edad Media[1], la imagen que nos ofrece Barrantes Maldonado en su Ilustraciones de la casa de Niebla (figura 01), en la que vemos las montañas de Kelaia peladas, la rada de Melilla ocupada por las tropas castellanas a caballo, los artesanos acondicionando las murallas de la Alafia[2]  y las embarcaciones en el mar, nos muestran el paso de la Edad Media a la Moderna, produciendo en el paisaje de Melilla la desforestación de los montes del valle del río de Oro[3] y una mayor aportación de tierras en la dársena de la ciudad desplazando sus instalaciones portuarias hacia levante, al peñón rocoso en la zona que hoy conocemos como Puerta de la Marina.

Esta nueva fachada meridional marítima de época moderna guardaba y protegía el embarcadero y condicionará toda una serie de instalaciones, que irán creciendo desde 1500 a 1515 alrededor de sus zonas de atraque, dando orden a las infraestructuras que conformarán la fachada sur de la Villa Nueva situada en el promontorio rocoso, con cerca de figura geométrica irregular, parecida a un rombo de cuatro lados conocidos como: Frente de Tierra al Oeste y Frentes de Mar al Norte (Trápana), Este (del Socorro) y Sur (la Marina), donde intervienen ingenieros como Gabriel Tadino de Martinengo quien se centra en la nueva separación del Frente de Tierra entre la villa Vieja y la Nueva (1527); Juan Vallejo, quien consolida la zona de las puertas (1529); Miser Benedito de Rávena quien revisa los trabajos del Frente de Mar (1533), ejecutando la obra el maestro mayor de obra Sancho de Escalante[4] al igual que el Aljibe Viejo (1549). Este maestro de obra trabaja con dos nuevos ingenieros Francisco de Tejada (1541) y Miguel de Perea (1549) a quien le sigue Francisco de Medina (1551) o Juan de Zurita (1556), terminando con los maestros de obra Domingo de Ormaechea los nuevos aljibes (1571)[5] y con Gregorio de Araño (1577). Es de destacar la tibieza o el desinterés mostrado por la Dinastía Uattasi del Sultanato de Fez con respecto a las obras y la reedificación de Melilla en este periodo, salvo esporádicos ataques.

Este frente construido en 1515 y reedificado en 1525, empezaba al oeste en el revellín de la puerta de Mar (actual torreón de la Cal) y continuaba con una muralla hasta el torreón de Muñiz (actual torreón de San Juan), que disponía de troneras y en el que se pensaba trasformar en[6] un baluarte “en punta de diamante” con lienzos y traveses (caras y flancos). Seguía con otro paño hasta la torre Camacha (torreón de Florentina) terminando con otros lienzos de muralla y el torreón de los Hombres del Campo (las Cabras), al que se preveía transformar en otro belguardo (baluarte pentagonal) de gran capacidad artillera (con seis cañoneras) y con bóvedas.

 

(Figura 02) El esquema nos muestra los primeros elementos de suministro indispensables.

Toda esta obra nos la muestra el plano de Heredia, en la planta general más antigua en la que se dibuja la ciudad rodeada de mar a final del siglo XVI. En él están dos recintos murados: la Alafia o Villa Vieja al oeste y la Villa Nueva hoy Primer Recinto al este, con “los nombres de los torreones que van puestos en su lugar” y sus dimensiones que son, de este a oeste, el “Torreón Mocho (de las Cabras) tiene 14 varas de ancho”, el “Torreón de Florentina por la línea tiene 10 varas de ancho”, el “Torreón de San Juan está sobre el puerto y varadero (por la línea tiene) 10 varas de ancho”, el “Torreón nuevo” (o de la Avanzadilla), la “salida al varadero” y “el varadero”. En el interior tras estos elementos están: el “Almacén de su majestad”, el “Hospital” y la “plaza y casa del alcalde” (figura 02), conjuntamente con los primeros elementos de suministro indispensables: los aljibes, el viejo situado cerca de la rada, y el nuevo, de mayor capacidad, situado hacia el interior.

Los aljibes flanquean las puertas de tierra y mar situadas en los túneles de Santa Ana de bóveda de sillería[7] de 14,5 metros de longitud, 2,60 de latitud y 3,50 metros de altitud, en dirección Este-Oeste, que une la capilla de Santiago con la actual plaza de la Maestranza, hacia la que tiene ligera pendiente y el túnel de la Marina con dirección norte-sur, de bóveda de ladrillo de 14,50 metros de longitud, 4 de latitud y 3,40 m de altura, articulando la plaza de los Aljibes con el torreón de la Cal al que desciende. 

El torreón nuevo o de la Cal es un revellín de planta semí elíptica situado a 9 metros de cota, con su eje mayor a 75º del paño de la batería de San Felipe; con radio mayor de 13 m (que es la distancia desde el extremo más exterior del túnel de la Marina hasta el exterior del pretil) y 5 metros de radio menor (que es la perpendicular del lado exterior de muro aspillerado de la puerta de la Marina). Su pretil es de un metro de espesor por un metro de altura y su paramento tiene una altura de 5 metros, descansando sobre un talud. Se une a la Puerta de la Marina, por un pasillo en rampa descendente en dirección oeste-este, de 2 metros de ancho. Lo cubre al sur un muro aspillerado de 10 metros de longitud por 7,50 de alto y un uno de ancho. Tanto la puerta como el muro descansan sobre un talud en roca caliza de 4,50 metros de altura. Tanto el Frente de Mar como estos elementos debieron ser muy parecidos a los de la fortaleza de Salses (figura 03).

 

(Figura 03) Fortaleza de Salses. 

Los túneles quedan protegidos en su parte superior por un cuerpo de guardia que se plantea en un llano sobre los túneles y situado en mitad de una rampa, que va desde el actual torreón de San Juan a la “plaza y casa del alcalde” sobre el aljibe mayor o nuevo.

En el llano se sitúa también una escalera que accede al “torreón nuevo” o de la Avanzadilla, de planta semicircular situada en la actualidad a 20 metros de cota, con 8 metros de diámetro y 19,70 metros de altura, antepecho de un metro de altura y 1,50 de espesor. Su altura está dividida en tres anillos de 1,50 metros, 2 y 6,50 metros, más un talud final de 10 metros de altura y 10 de diámetro en su base, mostrando así el aspecto que tenía el frente de la Marina.

(Figura 04) Plano realizado por el hidalgo Marcos de Ayala, datado en 1692.

La siguiente transformación la tenemos 92 años después en el plano realizado por el hidalgo Marcos de Ayala[8] (figura 04), en él se ve una garita en la ensenada, pero no San Antonio de la Marina, que empezó a construirse en este mismo año de 1692 en forma triangular en la base del torreón de San Juan, quedando reflejado por primera vez en el plano de 1695[9] tras el sitio del año anterior, mostrando con la misma disposición y con letra: F, la enramadilla. G, cubo de la puerta que sale al embarcadero (con dos cañoneras). H, la puerta. Y, el embarcadero. J, San Antonio (con una cañonera). K, torreón San Juan (con dos cañoneras). L, torreón de la

 

(Figura 05) En este plano, de 1695, se reflejan por primera vez las aperturas para cañones en un plano de Melilla.

Florentina (con una cañonera). M, torreón de las Cabras (con dos cañoneras). Como curiosidad es la primera vez que se reflejan las aperturas para cañones en un plano de Melilla (Figura 05). El plano de 1699[10] muestra ligeras variaciones: M, torreón que cubre la puerta de la mar (con dos cañoneras). Y, fuerte de San Antonio de la Marina (con dos cañoneras y una garita). N, varadero nuevo.

Este nuevo fondeadero situado bajo el torreón florentina y el de las cabras plantea una explanación en la roca y sobre ella una garita. Delante de él, al oeste, superando el torreón que cubre la puerta de la mar (M), continuando por la puerta de Santiago (L), terminando en el Baluarte de San José (P), podemos distinguir el acantilado rocoso de la fortaleza que termina en la playa del río de Oro y que a partir de este último punto (P) mostrará sus posteriores trasformaciones costeras.

 

(Figura 06) Mapa de Melilla, de 1715.

El frente renacentista de la Marina irá creciendo en elevación al ser reformado a la moderna en el siglo XVIII. Dividido en dos plataformas y una rampa que las une, las plataformas albergaban las baterías de San Juan y San Felipe, más alta, que guardaban y defendían la porción correspondiente al embarcadero, desde el revellín al fuerte de San Antonio de la Marina. Esta situación nos la enseña el plano de Melilla con sus contornos de 8 de octubre 1715 en el que por primera vez se muestran perfiles de la plaza, profundidad de los caladeros y la situación a cubierto de las embarcaciones (Figura 06).

El perfil del plano que se ve en la parte inferior de la planta es donde se pueden medir las alturas del terreno, siendo la línea de puntos la cota más menos cero del mar.

La profundidad del calado se muestra por los números puestos sobre el mar, que son las brazas de aguas desde la superficie hasta el fondo. Es a partir de este plano y durante todo este siglo cuando se realizarán constantes mediciones de los fondeaderos reflejadas en la cartografía, incluso en la del siglo XIX.

“Dentro del mar: la línea F.G.H. es la distancia de medio cuarto de legua donde los navíos pueden quedar cuando los vienen a esta plaza, no pudiendo arrimarse más sin peligro. La letra M.D. es donde las embarcaciones pequeñas vienen a descargar. La letra D.I. señala el varadero de las embarcaciones pequeñas que tienen esta plaza”. 

En tiempo de Canal se cerraron a prueba de bomba los aljibes de la plaza, y en el de D. Diego de Flores, coronel del Tercio antiguo de los Morados, la batería de San Felipe.

Aparece en el plano tras el frente de la Marina con los números: 5, Torreón de San Felipe (por primera vez con este nombre). 6, Puerta del Mar. 7, Torreón de San Juan. 8, Torreón de Florentina. 9, Torreón de las Cabras. 14, Casa del Gobernador. 16, almacén de víveres. 18, monto de tierra o escarpamento (antigua cantera). 19, fuerte de San Antonio que fue rehaciendo en 1714 por Hugo de Velasco, en 1737 se reedificó con puente levadizo y dos piezas para la defensa del puerto.

 

Figura 07) Plano de José Soriano Ortiz de 1722-29.

Los almacenes y depósitos que se instalarán en el frente de la marina de Melilla serían edificios de la monarquía para asegurar la conservación y el suministro de pertrechos; el primero fue el de “San Juan el Viejo”[11] que sería construido por Pedro Borras, posteriormente reformado con contrafuertes exteriores y una bóveda intermedia que sustituye a un suelo de madera, su planta aparece por primera vez en un plano de 1722-29 delineado por José Soriano Ortiz Capitán de Infantería del regimiento de Portugal (Figura 07).

El Almacén Viejo de San Juan, o Segundo de Florentina se compone de dos bóvedas sin el espesor suficiente como para estar a prueba, de rosca de ladrillo y cubierta a dos aguas, repartidas simétricamente en dos pisos, con contrafuertes exteriores. Las dimensiones de estas bóvedas son: 27 metros de longitud, 4,2 de latitud y 4,2 metros de altura.

En la cartografía de 1729–1730 aparece reflejado al oeste un pequeño saliente rocoso que delimitará la playa del río de Oro de los acantilados de la fortificación. Situado frente al baluarte de San José será denominado posteriormente “Espolón o Espigón de Santa Isabel” donde se formará la playa del “Mantelete”.

 

(Figuras 8 y 9) Cartografía de 1742 del ingeniero militar José Gandía, para el proyecto irrealizado de ampliación y mejora del puerto de Melilla.


La necesidad de poder contar con un buen puerto protegidos de las arenas y los ataques del río, que aseguraran el suministro a los nuevos almacenes, hace pensar que en el varadero excavado en el extremo sur en la prolongación de las murallas de la Marina y el Socorro, donde forma un ángulo comprendidos entre los torreones de Florentina (frente de la Marina) y Cabras (frente del Socorro), se pudiera realizar un muelle bajo el torreón de Florentina; este proyecto irrealizado, se recoge en la cartografía de 1742 del ingeniero militar José Gandía consistente en dos planos planta y perfil de 39 x 59 centímetros “del pequeño muelle que se propone construir en la punta de la Florentina de la plaza de Melilla para cubrir su surgidero”, con escala gráfica de 20 toesas (Figuras 8 y 9. COML-385 y COML-449). 

Para evitar el aporte de arenas a la playa del Mantelete y el consiguiente perjuicio al varadero, es ampliado el espigón de Santa Isabel conforme muestra el plano de 1750, en el que se prolonga el espigón hacia el mar mediante un sistema de cajón de madera de unas cinco varas de ancho por 15 de largo, en forma de barco hundido en dos tercios de su altura mediante relleno de piedra, que se internó en el mar a unas 25 varas del espigón. El espigón fue alargado mediante estaca de madera clavada sobre 10 barriles, también de maderas, sumergidos y protegidos por escollera de unas 3 varas de ancho por 25 de longitud, precedido al interior por un camino cubierto de 17 varas. Esta obra concluirá cerrando el Mantelete mediante decreto del día 8 de abril de 1755 en el que se ordenó la construcción de un muro de 354 varas de largo, seis de alto y uno de espesor, que uniera el fuerte de San Miguel al Espigón de Santa Isabel. Este espigón es denominado como “Espigón Nuevo” en 1766.

Esta nueva zona conocida como Mantelete es la que provocará todas las remodelaciones del espigón, el embarcadero, el muelle y las murallas del frente de la Marina que no terminarán hasta bien entrados el siglo XIX.

 

(Figura 10) Plano de la bahía de Melilla, hacia 1770.

Aproximadamente hacia 1770 es cuando se ve la necesidad de modificar y ampliar el varadero de la puerta de la Marina; este hecho aparece en la explicación de un plano de esta época[12]: marcado con la letra “L” está el varadero y desde L a M el “paseo amurallado que se ha de levantar por el peñón siendo aprobada el año anterior” con la “N, batería de San Antonio sacada de cimientos.” Con el nº “13, cuerpo de guardia de San Luís ídem “(en construcción). Curiosamente en el plano bajo el foso de la puerta de la Marina aparece un nuevo espigón que ampliará la superficie del varadero (Figura 10).

Siendo gobernador (año de 1737) Don Antonio Villalba y Angulo el ingeniero y capitán Don Juan Martín Cermeño, comenzaron a construirse los almacenes de provisiones, que se terminaron en 1781.

Almacén de las Peñuelas, o Primero del Principal se compone de siete bóvedas a prueba, de rosca de ladrillo y cubierta a dos aguas, repartidas en dos pisos, tres inferiores y cuatro superiores, cuyas dimensiones son 38,5 metros de longitud, 5 de latitud y 4,2 de altura. En el suelo de la bóveda inferior más cercana a la muralla, que además se utilizó como túnel, existen dos pozos.

En 1778 se reedificaron los almacenes de San Juan y Florentina.

Almacén de San Juan, o Segundo del Principal se compone de cuatro bóvedas a prueba, de rosca de ladrillo y cubierta a dos aguas, repartidas simétricamente en dos pisos, cuyas dimensiones son dos de 22 metros de longitud, 5 de latitud y 4,2 de altura y dos de 12 metros de longitud, 5 de latitud y 4,2 de altura.

Almacén de Florentina, compuesto por cuatro bóvedas a prueba, de rosca de ladrillo y cubierta a dos aguas, repartidas simétricamente en dos pisos, cuyas dimensiones son 29 metros de longitud, 5 de latitud y 4,2 de altura. Una de sus caras ocupa parte de la cortina.

Otra gran reforma del puerto se planteó el 7 de octubre de 1783 (figura 11. COML-450), que quedó reflejada en el “Plano que manifiesta el Muelle que se está ejecutando delante del Frente” de la Marina. La explicación del plano nos describe la obra que se realiza desde el Torreón de la Cal (A) al Torreón de San Juan (B) y todos sus elementos: D, Fuerte de San Antonio. E, Entrada de la Plaza con su puente levadizo y foso. F, Varadero. G, Andén o piso del muelle. H, Garitón o cuerpo de guardia (que es la obra nueva pintada en amarillo, representada por los perfiles 1-2 y 3-4). Y, Entrada o boca para el desembarco. K, Espigón formado de dos pontones abrigados de zarpa que defiende toda la obra de los temporales. Las nuevas cañoneras que debe montar la nueva batería son muy útiles tanto para defender de los ataques del río como para flanquear el frente de la plaza desde el Espigón del Mantelete hasta el Torreón de la Cal que carece de defensa lateral.

 

(Figura 11) Plano que manifiesta el Muelle que se está ejecutando delante del Frente de la Marina, de 1783. COML-450

Sobre los años 1791–1797 se ve la urgente necesidad de renovar y elevar la muralla comprendida entre la batería de San Felipe y la de San Juan motivados por los numerosos impactos de proyectiles que amenazaban la maestranza y a los aljibes de la Plaza. Esto implicará la reforma de los elementos de la zona portuaria y sus almacenes, situación que es recogida en un “Plano que manifiesta la distribución actual de la Maestranza de esta fortificación de Melilla pegada al muro principal, cuyo…….. intercepta y que se haya superior a la bóveda de paso a la Marina”, en su explicación nos dice: “A, Plaza del Principal. B, Bóveda de comunicación con la Marina. C, Baluarte de la Cal. D, Muelle. E, Muro del recinto cuyo mal estado amenaza provocar ruina al que está apoyado la Maestranza. F, Maestranza. G, Muros que deben renovarse igualmente por ser superior a la bóveda de comunicación. Las líneas negras pintadas de amarillo indican el espacio vacío… la nueva reedificación que se propone.”

Curiosamente este plano recoge dibujado en el Muelle bajo el Torreón de la Cal y la garita de la Puerta de la Marina un elemento que no registran los planos de 1790 y sí los de 1792, el “Cuartel del Retén y Marineros”.

La cartografía continúa con la descripción del “Plano y Perfiles de los términos en que se propone la edificación de la Maestranza con el mismo coste que tendrá su construcción en la forma que está en el día: a) bóvedas (que) se destinan a carpintería. b) ídem. Destinada a barrilería. c) ídem. Para la cerrajería. d) ídem. Para la herrería. e) Cuarto del interventor. f) Pieza para el repaso de los materiales que diariamente entran y se…. g) almacén para el … h) calderería. k) común (letrinas). i) batería de paso a la Marina. j) escalera que comunica al terraplén superior que se comunica con el resto del recinto. m) ventanas dispuestas en forma de cañoneras para el caso de la artillería en tiempo de sitio ofreciendo la disposición de la batería.”

La Maestranza Real (Figura 12. COML-497) corresponde a la planta 2ª en altura del frente de la Marina) se compone de cinco bóvedas, cuyas dimensiones son 11 metros de longitud, 4,4 metros de ancho y 4,2 metros de altura, más un corredor de unos 3,5 metros de ancho y 22,2 metros de longitud; este corredor comunica con el almacén de las Peñuelas.

 

(Figura 12) Maestranza Real, 1793. COML-497

Bajo esta disposición se encuentra el Cuartel de Santa Ana (corresponde a la planta 1ª en altura); se compone de una bóveda con arcos rebajados situada en el interior de la muralla y paralela a ésta, de 39 metros de longitud, 4,2 metros de ancho y 4,2 metros de alto, más tres bóvedas laterales de 6 metros de longitud por 4 metros de ancho, en las que se encuentra un antiguo aljibe que puede contener 42.400 arrobas de agua.

Los ataques enemigos de la orilla derecha del río ocasionaban tales destrozos por aquel punto, que obligaban a los barcos a ampararse detrás de Florentina y a construir hacia 1793 una batería llamada de la Cabeza de Muelle, a la que se le dio después el nombre de San Luís de la Marina, que se expone en el “Plano que demuestra la situación del lienzo de muralla que tiene que abrirse en la plaza de Melilla para su renovación, la de la Maestranza y bóveda de comunicación con la Marina”. Sus partes se encuentran enumerados con letras: A, Porción de muralla que debe demolerse. B, Torreón y galería de la Cal. C, Fuerte bajo de San Antonio. D, Batería de la Cabecera del Muelle. E, Torreón de San Juan. F, Estacada que se ha colocado en la actualidad, por cuyo medio resulta una excelente Plaza de Armas al pie de la brecha. G, Situación en donde se ha colocado el Falucho en la boca del Puerto.

De esta manera quedó dispuesta la Marina para que el 6 de mayo de 1794 comenzara el derribo de la muralla desde el torreón de San Juan al de la Cal, por encontrarse ruinoso, sacándole de cimientos al reconstruirlo: se trabajaba día y noche por el temor de que brecha tan considerable pudiese ser aprovechada por el enemigo, y, para evitarlo, se formó una empalizada en la Marina: los moros se opusieron con sus fuegos de fusil y cañón cuanto les fue posible a esta obras, que quedaron terminadas en 1796.

 

(Figura 13) La puerta de La Marina queda transformada en un cuerpo de guardia rectangular de dos pisos, de 7 metros por 6 metros, que protege las puertas de su planta inferior, a 5,30 metros y 6 de cota, siendo su puerta interior en dos hojas.

Definitivamente la puerta de la Marina queda trasformada en un cuerpo de guardia rectangular de dos pisos, de 7 metros por 6, que protege las puertas de su planta inferior, a 5,30 metros y 6 de cota, siendo su puerta interior de dos hojas (desaparecidas) y en su fachada exterior, presenta una puerta de 2,20 metros luz por 2,70 de flecha, bajo arco rebajado y adintelado con escudo en su clave, alrededor de la puerta un rebaje de 0,20 metros de profundidad por 3 de alto por 2,50 de ancho, que alojaba el puente levadizo, al tirar de cadenas que penetraban a través de dos huecos rectangulares situados en el salmer a la altura del arranque del arco; todo este conjunto queda enmarcado por dos columnas rectangulares planas de 1 m de ancho por 3,50 metros de alto, 4 metros de altura una imposta de 0,60 m, divide la planta baja de la alta, que a 1,20 metros de la imposta muestra 5 aspilleras de 1,10 metros por 0,10 metros y a un metro de estas queda rematada por un pretil aspillerado de un metro de altura. Su flanco muestra la misma disposición, en la planta alta en relación con su imposta y pretil aspillerado, salvo en las 7 aspilleras abocinadas, cuyas dimensiones son, 1,10 metros por 0,30 en el exterior y 0,40 metros por 0,10 en el interior (figura 13).

El estado final de las obras nos lo muestra la copia de “Nicolás Garrido” del “Plano que se levantó en cumplimiento de la real orden que comunicó el Señor Marqués de Vallehermoso Capitán General de esta costa y puerto en 5 de 1797”. En el que nos muestra “Plano Perfil y Elevación de una porción de la Plaza de Melilla que mira al sur en que se apoya la obra de la Maestranza aprobada por S. M. en 3 de julio de 1793 con el plano y perfil de los Almacenes de Víveres del Principal contiguos a ella en que se manifiesta el proyecto de terraplenar sus cabalices (Suposición o cálculo formado a partir de datos incompletos) y formar en la plaza que resalta un Parque de Artillería y una Batería cuyos fuegos son más perpendiculares a los ataques del Río que los de la baja y más horizontales con la altura de Tarara” (figura 14. COML-395).

 

(Figura 14) Plano Perfil y Elevación de una porción de la Plaza de Melilla. 12 de julio de 1797. Vicente Boada. COML-395.

Continúa con la “Explicación de la Obra que se haya debajo de la maestranza y sus contiguas.

Plano 1º A, Porción del Muelle. B, Cuartel de marineros. C, Subida de la Plaza. D, Torreón llamado de la cal. E, Bóveda de comunicación de la Marina. F, idem. Que se construidas en los cimientos que se erigieron para la superior. G aljibe. H, recipiente de este en que se deposita.

Plano 2º donde se ven todas las oficinas de la indicada Maestranza. Y, Barrilería. J, Almacén. K, Cuerpo de Guardia del Oficial del Principal. L, Cuadras de Carpintería. M, Ídem. de Cerrajería. N, Ídem. de Herrería. O, Carbonería. P, Común.

Plano 3ª en que se manifiesta la subida a la Plaza del Gobernador y la Batería que ha resultado sobre la citada obra de Maestranza. Q, Principal. R, Rampa que conduce a la del Gobernador y Batería Nueva. S, Batería de San Felipe bajo cuya horizontal se ha unido la cortina que manifiesta letra siguiente. T, Batería de la Maestranza. V, Rampa de comunicación. X Aljibes

Notas al todo de esta obra le falta para su conclusión lo siguiente: Tarar y enlucir todas las Bóvedas por dentro y solar su pavimento, poner la Explanada a toda su Batería y hacer el Pretil que mira al Principal.

Plano de Proyecto de los Almacenes de Víveres del Principal. Explicación: 1, calle de los Moros. 2, Ídem. Que conduce a la Carnicería. 3, las Peñuelas. 4, Plaza que resulta sobre los Almacenes. 5, rampa de comunicación de la explanada.

Melilla 12 de julio de 1797. Vicente Boada.

Ni que decir tiene que este proyecto no se realizó sobre los almacenes sino en la explanación de la “Carnicería”, cuya línea magistral queda visible el muro interior del callejón posterior del Almacén de San Juan Viejo.

De esta manera quedaría la Marina hasta que un siglo más tarde en 1893 se derriban el fuerte de San Luís de la Marina y la muralla que unía el torreón de la Cal con el fuerte.

Notas:

[1] Ver AKROS nº 8: “Las Infraestructuras Portuarias de Melilla en la Edad Media”.

[2] Alafia: fortificación medieval de la “Villa Vieja” que hoy ocupa el Segundo y Tercer Recinto Fortificado. Ver AKROS nº 1: “Espacio y funciones urbanas de la Melilla medieval”. 

[3] CABO, José Manuel. “Aproximación a la Historia Natural de Melilla”. HISTORIA DE MELILLA” (pág. 46). Ciudad Autónoma de Melilla. Melilla, 2005.

[4] Contrato con Sancho de Escalante, 5 de diciembre de 1533. AGS. leg. 468. Sancho de Escalante era maestro de cantería de Granada, e iniciaba su trabajo en Melilla como asentista de las obras.

[5] SÁEZ CAZORLA, Jesús Miguel y BRAVO NIETO, Antonio. “Melilla la Vieja”. HISTORIA DE MELILLA” (págs. 23-33). Ciudad Autónoma de Melilla. Melilla, 2005.

[6] SÁEZ CAZORLA, Jesús Miguel y BRAVO NIETO, Antonio. “Melilla la Vieja”. HISTORIA DE MELILLA” (págs. 23-33). Ciudad Autónoma de Melilla. Melilla, 2005.

[7] Esta bóveda se reedificó en 1622 a causa de un terremoto.

[8] MARCOS DE AYALA. Melilla, 14 de febrero de 1692. AGS. MPD.-VIII-253. leg. 2899 G. y Marina.

[9] Melilla, remitida en carta del alcalde de esta plaza de 8 de marzo de 1696. AGS. Negociado de Guerra. Leg. 3039: copia en colección Aparici. SHM. nº 284.

[10] DIEZ DE ANES, Alfonso. Plaza de Melilla, remitida en carta del alcalde de esta plaza de 3 de febrero de 1699. AGS. Negociado de Guerra. Leg. 3125: copia en colección Aparici. SHM. nº 282.

[11] Perfil del nuevo Almacén de víveres de la plaza de Melilla, año de 1722, sin autor, 1722, 26 x 38,5 cm., escala gráfica de 20 toesas, SHM. nº 4.690/2, C-32- 16/MEL-M1/16.

[12] Plano de la plaza de Melilla, sin fecha (hacia 1769-1770), sin autor, 42 x 52,2 cm., escala gráfica de 90 Toesas, SHM nº 4713/15. D-1-19/Mel-G4/11.

jueves, 29 de septiembre de 2022

Un interesante alzado de Melilla del año 1783 en el Archivo General Militar de Madrid

    Bajo la signatura digital ML-5/8 la Biblioteca Virtual de Defensa nos ofrece un plano de Melilla de las siguientes características:

Plano de la Plaza de Melilla [17--?].

Descripción física: 1 plano: ms., col., montado sobre tela; 60 x 75 cm

Nota: Manuscrito a plumilla en tinta negra y coloreado a la acuarela en siena, verde, gris, marrón y rojo Incluye un perfil de la ciudad vista desde el exterior (Este).

Orientado con estrella de ocho puntas, flecha y lis.

Relieve representado por sombreado.

Explicación del plano mediante clave alfabético-numérica.

Sello del Depósito General Topográfico de Ingenieros.

CDU: 460.38

Archivo General Militar de Madrid — Ubicación: PL — Signatura: ML-5/8 — Código de barras: 2132896.


    Este plano nos muestra un alzado desde el mar del frente de Levante de los recintos fortificados de “Melilla la Vieja”. Esta panorámica comprende desde el foso de la Cortadura situada junto al fuerte del Rosario a las Victorias, incluyendo las murallas de la Alcazaba y el fuerte de Santiago del Cuarto Recinto, al Frente de Mar esbozando el almacén de la Concepción y cuarteles, iglesia de la Concepción, Trápana, la puerta del Socorro, el hospital del Rey, la plaza de la Parada, el torreón de las Cabras y bajo éste, terminando, la punta de Florentina.

      Aunque el Archivo General Militar de Madrid no precisa quien es su autor, ni una fecha concreta, si nos indica su siglo de elaboración, el siglo XVIII. Esto nos hace fijarnos en otros detalles, los que nos ofrece su planta, para poder concretar la fecha de su delineación, y más concretamente en el lugar que nos ofrece mayores detalles de diferenciación durante este siglo, la puerta de la Marina señalada en el plano con la letra “A”. En este lugar, además de la puerta citada, nos ofrece la situación de otros elementos que evolucionaron durante esta época como la batería de San Felipe con la letra “M”, la maestranza Real con la letra “O”, que continua aun si realizar las reformas de 1793, el torreón de San Juan con la letra “B” o el fuerte de San Antonio de la Marina con la letra “N”.

     El elemento que nos da la fecha concreta de la elaboración de este plano no se encuentra signado, pero si ocupa el frente de todos los elementos descritos, es el espigón del puerto y más concretamente su relación con un proyecto que no se llegó a realizar, aunque quedase plasmado en este y en el plano de la Comandancia de Obras de Melilla marcado con el número “450” (COML-450) en el que sí se indicó su fecha, 7 de octubre de 1783.



     Como curiosidad este alzado es uno de los pocos que se ofrecen de la fortificación de Melilla, este de 1783 y otro realizado por Antonio Villalba del año 1800 (COML-16) que muestra el frente de la Marina. Estos dos alzado solo muestran los frentes de mar y no los de tierra, para poder ofrecer los frentes de mar y tierra tendremos que esperar al siglo XX y verlos en la cartografía del Plan Especial de los Cuatro Recintos Fortificados (PERI).

Detalle del plano de Antonio Villalba año 1800 (COML-16)